A veces sucede que... cómo decirlo... mmm...
Me explico:
El otro día fui a una fiesta al Centro Histórico, iba muy bien abrigado porque hacía un frío terrible, pero al llegar ahí me acaloré. Entonces me quité el suéter y luego la playera que llevaba debajo de mi camisa.
Al salir de la alegre reunión enrollé mi playera y me la puse como bufanda en el cuello, pues no quería que me diera un torzón o enfermarme de la garganta.
Habiendo dado apenas unos cuantos pasos me encontré con un indigente acostado en la banqueta durmiendo, me imagino, no muy placidamente.
Tenía los pantalones arremangados hasta las rodillas y no llevaba calzado alguno, tampoco calcetines, por lo que sus pies arrugados, sucios y cayientos estaban a la intemperie.
Cuando pasé junto a él me le quedé viendo fijamente. Me shockeó el hecho de que alguien durmiera sin taparse con una cobija o al menos con periódicos y cartones. De ahí que deduje que se trataba de un borracho, pues cualquier indigente con un dedo de frente sabe que la madrugada es cruel por lo que hay que tomar las debidas provisiones.
Yo seguí caminando y habiendo dado unos diez o quince pasos, mientras pensaba todo lo anterior, decidí regresarme y ponerle mi playera en sus pies descalzos. Supongo que eso no haría mucha diferencia, pero en ese momento yo no llevaba conmigo ni cobijas ni cartones.
Tengo que reconocer que no soy y nunca he sido ningún buen samaritano. Le di mi playera blanca de cuello en V no tanto por compasión, sino porque ya no me quedaba (me apretaba un poco de las axilas).
Mi conclusión es que realice una acción "buena", pero no por la razón correcta.
Sé que en muchas religiones el ser dadivoso, compasivo y generoso con los prójimos menos afortunados es fundamental. ¿Pero hasta qué punto?
¿Debí haberle dejado mi suéter junto con mis calcetines?
-o0o-
PD: Preocupado por hacerles más indigestas mis cavilaciones, se me ocurrió dejarles un tríptico; ya son fotos que hice hace tiempo, pero bueno...