martes, 11 de mayo de 2010

El hamster bala

Me dí a la tarea de buscar (googolear) una nota que leí hace muchos años y que no deja de impresionar (por increíble y bizarra) a quienes se las cuento. Sin más preambulo, hela aquí:

-o0o-

Erik Tomaszewski y su pareja homosexual Andrew "Kiki" Farnum, fueron ingresados para un tratamiento de emergencia, después de que una sesión de sodomía les fuera realmente mal.

"Introduje un tubo de cartón por su recto, y deslicé dentro a Raggot, nuestro hamster. Como siempre, Kiki gritó "¡ARMAGGEDóN!", en señal de que era suficiente. Intenté recuperar a Raggot, pero no podía salir, así que me asomé al tubo, y encendí una cerilla, pensando que la luz le atraería".

Los doctores de la Unidad de Quemados Graves del Hospital de SALT Lake City, en una rueda de prensa, describieron a través de su portavoz lo que ocurrió después:

"La cerilla encendió los gases intestinales y una llamarada salió por el tubo, produciendo graves quemaduras en la cara del Sr. Tomaszewski.

También se incendió el pelaje del desafortunado hamster, lo cual provocó que se prendiera otra "bolsa de gas", mayor y mas interna, propulsando al roedor hacia fuera como una bala de cañón. 


Tomaszewski sufrió quemaduras de segundo grado y rotura del tabique nasal, a consecuencia del impacto del hamster, mientras que Farnum sufrió quemaduras de primer y segundo grado en el ano y en el tracto intestinal inferior (recto).”  


Sin comentarios...

2 comentarios:

babilonia chilanga dijo...

¡Chale! ¿Y qué pasó con el hamster? ¿Sobrevivió a aquella triste e indigna aventura?

Dámaso Pérez dijo...

Requiem por un roedor

Según los últimos reportes, el pequeño roedor sufrió un grave traumatismo craneoencefálico al estrellarse en la nariz de Tomaszewski, al cual, sin embargo se repuso, no así de las severas quemaduras producto del pelaje encendido al interior de los apretados intenstinos de Andrew "Kiki" Farnum...

Descanse en paz...